(VOVworld) – Gracias a la eficiencia del movimiento de construcción de nuevo campo, la fisonomía rural en Thanh Van, del distrito de Thanh Oai de la capital Hanoi, ha cambiado positivamente. Ahora la comuna cuenta con modernos edificios, bulliciosos mercados y amplias carreteras de hormigón. La gente allí muestra satisfacción por su nivel de vida.
La mecanización del cultivo de arroz garantiza un redimiento
más alto del grano en Thanh Van
Situada a 15 kilómetros al Sur de Hanoi, Thanh Van es una localidad que tiene tradición agrícola. Los residentes locales se ganan la vida mediante el cultivo de arroz. Anteriormente, su vida fue muy difícil. A principios de los años 90, hasta 85% de las familias en Thanh Van se vieron afectadas por la hambruna. Pero todo ha cambiado 20 años después. De los 6 mil 500 pobladores, nadie aún está atrapado por la pobreza y muchos ganan mejores ingresos para remodelar sus casas. Todos los niños ya gozan de la educación escolar. Estos avances son resultados de la edificación de la nueva área rural en la comuna, bajo un espíritu de autoayuda que confía en sí mismo empleando sus propios recursos en vez de esperar las inversiones estatales. Quang Van Thinh, secretario del Comité Partidista de Thanh Van, recordó: “La idea de construcción de la nueva ruralidad en Thanh Van nació en la década de 1990, cuando la vida aún era muy difícil. Al principio, solo esperábamos mejorar un poco la existencia material y espiritual aquí, considerando que con esto, cumpliríamos con los acápites del nuevo campo. Así, solo pensábamos de que modo asegurar la alimentación, vestidos y viviendas para nuestros habitantes. Pero, con esa esperanza, hemos sido pioneros en desplegar la campaña en todo el país.”
Un jardín de naranja de Thanh Van en temporada de cosecha
En 1991, las autoridades comunales establecieron un fondo para erradicar la pobreza. Cada persona podía solicitar un préstamo sin tasa de interés, del Fondo inicial de solo 20 toneladas de arroz y 20 millones de dong (mil dólares) para comprar semillas y ganados o aves de corral, o reconstruir casa. Desde entonces, ese fondo se ha ampliado para ayudar a más agricultores. Asimismo, la administración local ha implementado la planificación de terrenos cultivables para la utilización a más largo plazo y la producción masiva. De esta manera, han dividido un 6% de su extensión agrícola total de 650 hectáreas para la reestructuración de los cultivos. Además, ha reservado suelos para construir nuevas viviendas y vías rurales, en aras de facilitar la producción, transportación y comercio agrícolas. Refiriéndose al tema, Nguyen Chi Tuyen, jefe de la aldea de Bach Mao, en la comuna de Thanh Van, detalló: “Todas las casas modernas de varios pisos que pueden encontrarse en cualquier rincón de nuestra comuna, son frutos de la llamada “revolución de tierras”. Sin los esfuerzos del gobierno local, no podemos poseer viviendas tan grandes y hermosas.”
Los campsinos mayores de 60 años de edad esperan recibir
pensiones de jubilación mensuales
Lo más destacado es que la localidad ha movilizado cerca de 600 mil millones de dongs (unos 30 millones de dólares) desde su propia población para mejorar la infraestructura, sin recurrir a los presupuestos estatales. Los progresos en la construcción de la nueva ruralidad ha aumentado el valor de la tierra en Thanh Van. El campo local Bo Nau se ha convertido en un prototipo del gran campo de arroz, cuyos productos han reafirmado el prestigio en el mercado. Aparte de la edificación de nueva área campestre, las autoridades de Thanh Van se concentran en asegurar la democracia y la transparencia en los asuntos comunitarios, lo que permite a la gente a discutir y supervisar cada proyecto. Esta política ha obtenido un alto consenso y confianza del pueblo, tal como expresó Nguyen Tam Thanh, un residente local: “Estamos respaldando al movimiento porque vemos y reconocimos sus beneficios. Gracias a esto, hemos mejorado la calidad de nuestra vida.”
Con el éxito del fondo en erradicar la pobreza, los pobladores de Thanh Van decidieron contribuir de nuevo para crear un nuevo recurso de bienestar social por 46 mil millones de dong (o 2,16 millones de dólares). Así, la comuna se ha convertido en la primera de todo el país que concede pensiones de jubilación a los agricultores. El nuevo modelo de desarrollo rural de Thanh Van, que ha recogido las aspiraciones de su gente, ahora se califica como un ejemplo a seguir para las otras localidades vietnamitas, por su autonomía e independencia.