Los "To he" de la aldea de Xuan La se diversifican en formas

 La historia de To He comenzó en Vietnam hace más de 300 años. Este juguete hecho de harina de arroz glutinoso con diferentes figuras, incluidos animales y objetos, incorpora también un valor cultural, ya que era una ofrenda en las pagodas. La belleza y las figuras de este producto constituyen una atracción para los niños, y la destreza de los artesanos siempre hechiza los ojos de los infantes. Sobre el origen del oficio, Dang Van Khuong, un artesano de la aldea, reveló: “Este oficio surgió en nuestra aldea hace tres siglos y lo seguimos practicando con el deseo de preservar esta tradición firmemente arraigada. Anualmente organizamos concursos entre los mejores trabajadores en ocasión de la fiesta aldeana que se efectúa el 15 de enero del Calendario Lunar. Además, establecemos clubes de artesanos de To He con hasta 120 miembros, para compartir las experiencias y técnicas de la profesión. También presentamos nuestras creaciones en los programas de intercambio cultural en algunos países de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático, Japón, Corea de Sur, China y Estados Unidos”.

Contra lo que pueda parecer a algunas personas, hacer figuritas de pasta de forma artística requiere habilidad, creatividad y precisión en cada detalle para poder crear productos llamativos. Dang Van Hau, otro artesano, explicó al respecto: “Para hacer figuras perfectas, un paso importante es hervir la harina de arroz al vapor para que sea más flexible. En esta etapa es necesario prestar atención al factor meteorológico porque en invierno se seca más rápidamente que en verano. Para trabajar con mayor facilidad y lograr una mejor calidad del juguete debe elegirse la variedad de arroz glutinoso “nep cai hoa vang”. Antes, para colorear el polvo, usábamos tintes naturales, derivados de vegetales y tubérculos. Ahora, utilizamos colorantes comestibles para hacerlo más conveniente y que el color del producto sea más fresco y hermoso”.

Artesanos de Xuan La en una exposición presentando al público nacional e internacional sobre su producto tradicional

Los juguetes de Xuan La se diversifican cada vez más a medida que evolucionan los gustos de los clientes. Además de figuras comunes como animales y frutas, los artesanos de allí hacen personajes de cuentos de hadas o cómics como Aladino, Doraemon y Pokémon, etc.

En octubre de 2010, con motivo del Milenio de Thang Long-Hanói, los artesanos de este poblado ganaron tres registros nacionales con una estatuilla de dragón de 300 kilogramos, una figura de tortuga de 250 kilogramos y una bandeja de frutas de 25 kilogramos, todas las cuales fueron las más grandes en su tipo. Estos títulos son un testamento de la marca tradicional del pueblo tradicional de Xuan La. Chu Van Chien, un lugareño dijo lo siguiente: “Para mí, además de habilidad, es necesario tener una rica imaginación para capturar exactamente las ideas de los niños y hacerlas realidad. Sabemos que el juguete To He capta cada vez más el interés de los menores vietnamitas, por lo tanto queremos promocionar este oficio no solo para desarrollar un juego tradicional sino también para preservar un rasgo cultural del país.”

Los productos de To He están presentes no solo en el mercado nacional sino también en el extranjero, ayudando a los amigos de otros países a apreciar la creatividad de la infancia vietnamita.