(VOVWORLD) - El Ministerio de Economía de Afganistán envió ayer un aviso a todas las organizaciones no gubernamentales, en el cual exigía la prohibición del trabajo a las, debido a las "numerosas quejas sobre el incumplimiento del uso de pañuelo islámico, así como otras normas y reglamentos relativos al trabajo de las mujeres en organizaciones nacionales e internacionales".
 La gente en las calles de Kabul, Afganistán. (Foto: AFP/VNA) |
La petición llegó menos de una semana después de que el ministro de Educación Superior del país islámico prohibiera a las mujeres afganas asistir a la universidad, desatando así la indignación a nivel mundial.
Desde que asumieran el poder en Afganistán, los islamistas de línea dura han impuesto restricciones draconianas a las mujeres.
La decisión de las fuerzas gubernamentales talibanes enfureció a muchos grupos políticos de Afganistán, de algunos países musulmanes de la región y fuera de ella. Arabia Saudí, Turquía, Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Qatar han condenado la política de los talibanes. Mientras tanto, Estados Unidos y algunos países occidentales advirtieron a los talibanes de que sufrirían más consecuencias al endurecer el control social.