El presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Paul Ryan (Foto: Xinhua/VNA)

Ese borrador  recibió 121 votos a favor y 301 en contra, en medio de las protestas de los legisladores tanto democráticos como republicanos, quienes argumentaron que el documento no es suficiente para poner fin a la inmigración ilegal.

Se trata de un fuerte golpe a los esfuerzos en el tema migratorio de la Administración de Trump y una evidencia de la profunda división en el Congreso norteamericano, especialmente cuando los diputados aplazaron dos veces una votación sobre la referida reforma la semana pasada.

Ese proyecto de Ley abría un camino a la legalización definitiva de los menores inmigrantes recién llegados (dreamers, como se les conoce allí), pero también incluía recursos para la construcción de un muro en la frontera con México. Además, ordenaba al Departamento de Seguridad Interna a mantener juntas las familias durante el proceso penal por su situación ilegal en Estados Unidos.