(VOVworld) – El Ministerio de Asuntos Exteriores del Reino Unido convocó el 7 de enero al embajador de Corea del Norte en Londres después de que se llevara a cabo la prueba de una bomba de hidrogeno por parte de Pyongyang el 6 del corriente mes. El secretario de Estado de Relaciones Exteriores Hugo Swire afirmó el apoyo británico a la implementación de nuevas medidas significativas contra el régimen norcoreano, considerando el ensayo nuclear norcoreano como "una clara violación de una serie de resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU".
El mismo día, la Cancillería de Tailandia expresó su profunda preocupación, calificando la acción de Pyongyang como una infracción de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU que erosiona los esfuerzos internacionales en el desarme nuclear de la península coreana. Entretanto, Australia criticó la prueba nuclear norcoreana, describiéndola como “un perjuicio grave de los estándares internacionales acerca de la no proliferación nuclear”, además de “incumplir el Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares y el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares”.
Especialistas analizan el epicentro del sismo provocado por el ensayo nuclear norcoreano
|
Mientras el canciller de Noruega, Borge Brende consideró el incidente como una amenaza grave a la seguridad global y exhortó al rechazo categórico internacional hacia la acción norcoreana. Por su parte, la República Checa tildó de “muy irresponsable y lamentable” la prueba nuclear de Pyongyang que “desestabilizará la paz en la Península de Corea y en toda la región, en general”. Desde Lisboa, el ministro de Asuntos Exteriores de Portugal, Augusto Santos Silva repudió también esta acción de Pyongyang y exhortó al Consejo de Seguridad de la ONU a adoptar medidas eficaces destinadas a impedir otros actos similares. Entretanto, Bielorrusia urgió a Corea del Norte a acatar las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y evitar el agravamiento de la situación.
En la rueda de prensa efectuada el 7 de enero, la portavoz de la Cancillería de China, Hua Chunying informó que Beijing convocó a un alto funcionario diplomático de Corea del Norte para expresarle el criterio de China al respecto.
El mismo día, la agencia de noticias Yonhap de Corea del Sur citó la fuente de la Oficina de presidente del país revelando que la presidenta Park Geun-hye y el primer ministro de Japón, Shinzo Abe acordaron estrechar la coordinación para contribuir a acelerar la aprobación por parte de la ONU de medidas más resueltas para sancionar a la República Popular Democrática de Corea.