(VOVworld) - La economía británica comenzó a ralentizarse después de un 2016 de crecimiento impresionante pese al voto de Brexit, debido a la lenta progresión del sector de servicios, un pilar de la referida cartera en el país.
Según la última encuesta de IHS Market, el Índice de Gestores de Compras en ese segmento se redujo de 54,5 puntos en enero de 2017 a 53,3 en febrero, cifra más baja que la de 54,1 augurada por los analistas.
Según las empresas británicas, esa situación se originó por la escalada de los precios de los productos y la apretada financiación de consumidores.