(VOVworld) – El Estado Islámico reivindicó el 8 de enero el atentado con un camión bomba el día anterior contra un centro de entrenamiento policial en la ciudad de Zilten, en el oeste de Libia, el cual causó más de 50 muertos y 100 heridos.

Se trató del ataque más letal en ese país de África del Norte desde el derrocamiento del líder Muammar Gaddafi en 2011. Una fuente de dicha organización extremista reveló que el atentado forma parte de las operaciones continuas de Abu al-Mughira al-Quahtan, presunto líder del Estado Islámico en Libia.

El mismo día, la Asamblea General de las Naciones Unidas condenó el ataque, considerándolo como una acción cruel y exhortó al enjuiciamiento de sus responsables. La declaración de la ONU urge a todas las facciones en Libia a realizar esfuerzos para luchar contra las amenazas terroristas mediante el acatamiento del acuerdo político que define la instauración de un gobierno de unidad en el país.