(VOVworld) – Hossain Hajem, vice alcalde de Mosul, capital de la provincia de Nineveh en el norte de Irak, confirmó este 14 de agosto que los terroristas del autodenominado Estado Islámico utilizaron armas químicas prohibidas en ataques contra civiles de Osija, una aldea de la región. El funcionario declaró que por lo menos 17 personas, entre ellas mujeres y niños, sufrieron problemas respiratorios después del lanzamiento de proyectiles por el grupo yihadista contra esta localidad ubicada en las afueras de Mosul.
Según las primeras investigaciones, esas bombas contenían cloro, uno de los gases más dañinos para los pulmones. Por lo cual fue prohibido al tenor de la Convención de Armas Nucleares en 1997.
Hajem añadió que los terroristas dispararon contra otros pueblos en las últimas 24 horas, provocando tres muertes mientras cuatro personas más quedaron lesionadas. La ciudad de Mosul, localizada a unos 400 kilómetros de Bagdad era un baluarte del Estado Islámico.