En esa magna cita, celebrada en el puerto adriático de Trieste, Albania, Bosnia-Herzegovina, Kosovo, Macedonia, Montenegro y Serbia acordaron crear una zona económica y comercial común.

El primer ministro italiano, Paolo Gentiloni, y la canciller alemana, Angela Merkel en la cumbre

Una declaración final del país anfitrión, Italia, dijo que el futuro de los Balcanes Occidentales radica en la UE. La cumbre acordó siete nuevos proyectos de conectividad con una inversión total de más de 570 millones de dólares, prometiendo una nueva donación de 13 millones de dólares para proyectos de energía y transporte en la región.

La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés Emmanuel Macron apoyaron la adhesión a la coalición regional de dichos países de, subrayando que la estabilidad política en la región también significa la de la UE. Mientras el primer ministro italiano, Paolo Gentiloni, dijo en su discurso de clausura que la ampliación del bloque no está a la vuelta de la esquina, pero que debe ser presentada como una posibilidad concreta para los países de la región.