(VOVworld) - El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se mantiene firme en su decisión de no enviar tropas terrestres a combatir al Estado Islámico (EI) en Iraq. Lo dijo un día después de las declaraciones del jefe del Estado Mayor Conjunto, Martin Dempsey, quien sugirió que se podría desplegar tropas norteamericanas en una misión de combate en situaciones como un posible intento de los yihadistas de retomar la presa Mosul, de las que fueron expulsados.


“El ejército estadounidense no tiene ni tendrá una misión de combate”, insistió el presidente Obama el miércoles durante una visita a la base de la Fuerza Aérea en MacDill, en el Estado Florida. Dejó claro que Washington solamente apoyará a sus socios en operaciones de entrenamiento y proporcionará equipos para las fuerzas iraquíes. “Es la única solución que tendrá éxito a largo plazo”, enfatizó.

El mismo día, con 273 votos a favor y 156 en contra, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó la propuesta del presidente norteamericano de enviar armas a las fuerzas opositoras moderadas en Siria para combatir contra el Estado Islámico.