El presidente ruso, Vladimir Putin (Foto: Sputnik)

Los dos dirigentes recordaron los logros alcanzados en la última ronda de negociaciones sobre Siria en Astaná (Kazajistán) y destacaron la importancia de la colaboración entre el Gobierno de ese país y los rebeldes, que no se relacionan con las Unid ades kurdas de Protección Popular y otros grupos terroristas, con el fin de conseguir un progreso constructivo. Coincidieron en evitar que Siria se convierta en una zona de conflicto entre Israel e Irán. También, abogaron por la soberanía y la integridad territorial de Siria.

Otra de las cuestiones que hablaron Putin y Erdogan fue el desarrollo de las relaciones entre los dos países, concentrándose en los proyectos estratégicos en el sector de la energía, el gasoducto Turk Stream y la central nuclear de Akkuyu, así como el uso de sus propias monedas en las actividades comerciales bidireccionales.