(VOVworld) – Inmediatamente después de su viaje a la Ciudad del Vaticano, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, recorrió las zonas más afectadas por el terremoto de una magnitud de 7,8 que sacudió el Norte del país el 16 de abril. En una entrevista concedida a la prensa, el mandatario destacó que el trabajo más importante de momento es rescatar a los atrapados en los edificios derrumbados y afirmó que la mala calidad de las obras constructivas es la principal razón del elevado saldo de muertes. También expresó su preocupación por el aumento en el número de fallecidos e indicó que la superación de los perjuicios costará mil millones de dólares. Asimismo, informó que muchos centros de abrigos temporales están abiertos para los afectados, mientras los heridos fueron trasladados a los grandes hospitales para tratamiento.
El presidente Correa y un herido por el terremoto el 16 de abril
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Según las fuentes, la cifra de muertos se incrementó a 413 personas. En tanto, el ministro de Transporte y Obras Públicas dio a conocer que el 10% de las vías fueron destruidas totalmente y la reparación durará años.
Actualmente, unos 450 millones de dólares del fondo de emergencia de Ecuador fueron desembolsados para salvar la vida, proporcionar productos de primera necesidad y reconstruir alojamientos para las víctimas. Los Bancos Mundial e Interamericano de Desarrollo también ofrecieron una ayuda financiera valorada en 600 millones de dólares al país sudamericano, mientras varias naciones del mundo como Venezuela, Chile, Cuba, Colombia, México, España y Suiza también enviaron artículos de ayuda y expertos de rescate a Ecuador.