(VOVworld) - Iraq decidió el 7 de marzo cerrar sus pasos fronterizos con Siria ante el temor de que la crisis se extienda a ese país. De acuerdo con el portavoz del Ministerio de Defensa iraquí, Mohammed al-Askari, además de cerrar el acceso fronterizo de Yaarubiyeh, que comunica la región sureña siria y la provincia de Nineveh en el norte del país, Bagdad desplegará más tropas para enfrentar los intercambios de disparos en la parte vecina.
En otro acontecimiento, el mismo día, el Consejo de Seguridad de la ONU exhortó a insurgentes sirios a entregar más de 20 miembros de las Fuerzas de Paz de las Naciones Unidas que mantienen cautivos cerca de los Altos de Golán. Según diplomáticos, los retenidos son observadores de la ONU de separación de fuerzas en Golán, procedentes de Filipinas.