Los objetivos son utilizar de manera efectiva y justa los recursos marinos e insulares para servir al desarrollo socioeconómico y, a la vez, garantizar la defensa nacional, la seguridad, los asuntos exteriores y la cooperación internacional.

El plan establece que se controlará y reducirá significativamente la contaminación, se protegerá la biodiversidad, y se promoverán los valores del patrimonio cultural marítimo. El impacto de los desastres naturales se minimizará tanto como sea posible.

Foto de ilustración: VNA

De esa manera, Vietnam podrá responder de manera proactiva y efectiva al cambio climático y al aumento del nivel del mar, encaminándose hacia el objetivo de convertirse en un país fuerte y rico en recursos marítimos.

Para 2030, los recursos marinos e insulares serán explotados racionalmente.

Se ha identificado que los principales sectores de la economía marítima, en orden de prioridad, son el turismo y los servicios, la explotación de petróleo y gas y otros recursos minerales marinos, la acuicultura y la pesca, la industria costera, las energías renovables y los nuevos ámbitos económicos relacionados, así como la mejora de las vidas y los medios de subsistencia de la comunidad.

Para 2050, los recursos marinos e insulares se explotarán adecuadamente para convertir a Vietnam en un país fuerte sobre la base del crecimiento verde.