(VOVworld) – El homenaje a los reyes Hung no solo se realiza en la tierra de los fundadores del país en el Templo en su honor en Phu Tho, sino también en diferentes localidades de Vietnam, y en el exterior. Esta creencia popular permanece en el alma de cada vietnamita sin importar donde vive, en especial, cada vez que llega el 10 de marzo lunar.
Este año, a la familia de la señora Nguyen Thi Hoi, conocida en el distrito de Dat Do, provincia de Ba Ria- Vung Tau por la fabricación de pasteles se le encargo elaborar ofrendas a los reyes Hung, con 500 “bánh tét”, tortas tradicionales hechas de arroz glutinoso, frijoles y carne de cerdo. Desde el principio del mes de abril, la señora Hoi preparó más de 200 kilogramos de arroz, 100 kilogramos de frijoles verdes y negros, 100 kilogramos de hojas de plátano, más calderos y leñas para cumplir de mejor manera esta labor tan especial. Todo estaba listo para que en la mañana del 15 de abril, es decir el 6 de marzo lunar, la señora Hoi y otros 5 miembros de su familia emprendieron la envoltura de 250 pasteles con frijoles negros y otros tantos con frijoles verdes. Para cocinar bien los pasteles, hicieron minuciosos cálculos de combustibles y tiempo, en concreto, los de frijoles verdes se cocían en 7 horas y 8 horas con los de frijoles negros. “Elaborar pasteles tradicionales para rendir tributo a los reyes Hung es una ocasión para que expresemos nuestra veneración y gratitud a nuestros ancestros”, dijo la comerciante, quien además expresó: “Me siento honrada al ser escogida para elaborar ofrendas a los fundadores del país. Esta es una tarea que me encargaron pero me esforcé mucho para cumplirla lo mejor posible.”
Los “bánh tét” elaborados por habitantes del distrito de Dat Do,
provincia de Ba Ria- Vung Tau son ofrendados a los reyes Hung
entre muchos otros manjares tradicionales en esta ocasión
Los pasteles elaborados por la familia de la señora Hoi serán llevados hoy desde Ba Ria- Vung Tau hasta el monte de Nghia Linh, Phu Tho, para rendir tributo a los reyes Hung. Además de estos “bánh tét”, otras especialidades de las tres regiones del país, de las provincias norteñas de Lang Son y Ha Nam, las centrales de Thanh Hoa, Ha Tinh, Dac Lac y Binh Dinh, y las sureñas de Dong Nai y Can Tho, entre otras, también se ofrendan a los monarcas en su memoria, y como muestra de gratitud de sus descendientes.
Mientras el culto nacional se está celebrando en la provincia de Phu Tho, considerada como la cuna de los reyes Hung, en un santuario erigido en su honor en el extremo sur del país, en el poblado de Giao Khau, del distrito de Tan Phu, Ca Mau, los humos de inciensos hacen de este espacio una evocación de los habitantes locales que todos los años realizan con gratitud los rituales tradicionales.
Con el credo en los méritos de los Reyes Hung como fundadores de la nación, desde el surgimiento del Estado vietnamita, las administraciones locales y el pueblo en todo el país recaudaron dinero y donaron terrenos para la construcción de cerca de mil 500 templos de los Reyes Hung que se encuentran a lo largo de su territorio nacional, en Hai Phong, Bac Ninh, Thue Thien Hue, Lam Dong, Khanh Hoa y Ciudad Ho Chi Minh, como para citar algunas localidades. Pham Ba Khiem, vice director de la Sección de Cultura, Deportes y Turismo de la provincia de Phu Tho precisó: “El credo popular vinculado con los reyes Hung no se aplica solamente en su Templo en Phu Tho, sino en toda esta provincia y en todo el país. Particularmente en Phu Tho existen 326 santuarios donde se veneran a estos monarcas y los personajes de su tiempo.”
Procesión de palanquines en la fecha conmemorativa de la fundación
del país, 10 de marzo lunar
Más lejos de los Templos en homenaje a los mitológicamente considerados fundadores del país se encuentra un recinto de similar propósito en la ciudad de San José, en el Estado de California, Estados Unidos. Quien construyó el santuario fue Nguyen Thanh Liem. Este compatriota, tras establecerse allí compró un terreno sobre el cual levantó ese Templo y además creó una Asociación relacionada que integra ya a más de mil connacionales.
Este año, muchos “việt kiều”, como suelen llamar a los vietnamitas residentes en el exterior, regresan a la tierra de los fundadores para participar en el Festival nacional y rendirle homenaje a los monarcas. El señor Le Van Nguyen, residente en San José, Estados Unidos durante más de 40 años dijo: “Estamos muy orgullosos y emocionados de ser vietnamitas y descendientes de los Reyes Hung, de la estirpe de Hada y Dragón, como cuenta la mitología popular. Regresamos al país como para sentirnos otra vez vinculados con nuestras raíces. Vivimos lejos de la Patria, pero no de nuestro origen y de nuestros ancestros.”
El culto popular a los Reyes Hung reúne por siempre a los vietnamitas en un espacio de veneración y gratitud hacia los antepasados, quienes tuvieron el mérito de fundar la nación y defenderla de las invasiones extranjeras en su milenaria historia.