(VOVWORLD) - Al final del callejón número 82 de la calle de Yen Lang, en Hanói, hay una cafetería llamada Mo Pho (Calle de los Sueños). Esta es diferente a las otras. Es un destino familiar de las personas con buen corazón, puesto que aquí se celebran frecuentemente actividades caritativas para ayudar a la gente en situación difícil.
Pequeña, simple y humilde son las palabras más exactas para describir Mo Pho. A primera vista, no se encuentra nada especial en la decoración de este local, ya que al igual que las otras cafeterías, posee un bar y varias mesas y sillas para los clientes. Sin embargo, si se observa desde más cerca, se puede diferenciar de las otras por las fotos de niños étnicos con una sonrisa brillante y pura, las postales con dedicatorias al fallecido compositor Trinh Cong Son colgadas en las paredes, o los instrumentos musicales al fondo del primer piso.
Fotos de niños étnicos en la pared de la cafetería (Foto: Quynh Mai/VOV5)
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Como de costumbre, todos los viernes, este local de unos 40 metros cuadrados está lleno de gente, de manera que no hay suficientes sillas para todos y los camareros tienen que sacar más afuera. Es entonces cuando se efectúan las noches de música en directo con el fin de movilizar donaciones para los menores en las zonas montañosas y remotas, a fin de ayudarles a tener una vida mejor con todas las condiciones educativas y médicas que se merecen.
Fundado en 2016, el lugar es el sueño cumplido del doctor Ngo Tuan Anh, del Departamento de Cardiología del Hospital 108, y sus amigos de la Asociación de Doctores Voluntarios. Aquí, los miembros de la agrupación se reúnen a menudo para intercambiar iniciativas en busca de más fuentes financieras al servicio de sus actividades caritativas.
De hecho, Mo Pho no solo vende bebidas, sino que también organiza varios eventos para ese fin. Además, este es uno de los lugares favoritos de los amantes de la música en directo. Lo más especial durante las noches de los viernes constituye en que todas las consumiciones son gratuitas, pero los clientes, voluntaria y alegremente, pagan por ellas poniendo dinero en una caja de caridad en el rincón de la sala. Mientras, los sábados son para los exámenes de salud y los domingos, las clases de primeros auxilios para niños. Todo se realiza gratuitamente.
En el segundo piso de la cafetería se encuentra la librería a la que los filántropos donan libros para los menores más pobres. Sin embargo, para poder organizar este tipo de actividades humanitarias, Mo Pho ha pasado por muchas dificultades. El doctor Tuan Anh compartió: “Al principio, el mayor obstáculo que enfrentamos era el financiero. Afortunadamente, recibimos mucho respaldo de los altruistas de todo el país. Sin importar de dónde provienen o qué trabajos tienen, estas personas, con su buen corazón, acuden aquí para realizar las actividades caritativas según sus capacidades. Por ejemplo, los jóvenes ayudan a conectar la asociación con la gente, mientras que los médicos realizan los diagnósticos y tratamientos y los profesores enseñan las habilidades básicas para los menores.”
La banda de Mo Pho (Foto: Quynh Mai/ VOV5)
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Con melodías dulces y agradables de fondo, Tuan Anh continuaba contando sobre su iniciativa de Mo Pho, así como su proceso de fundación y desarrollo. Dijo que, en una ocasión, cuando participaba en un programa de tratamientos médicos gratuitos para las personas con discapacidad visual en la provincia norteña de Bac Ninh, encontró a algunos talentos musicales juveniles. Decidió reunirles para establecer la banda de Mo Pho. Actualmente, estos jóvenes están cursando en la Academia Nacional de Música de Vietnam. Para ellos, las actuaciones de cada viernes en la cafetería han formado una parte importante de su vida. Aunque no pueden ver claramente las teclas de los instrumentos musicales, estos artistas los tocan con todo su corazón. Tran Trung Hieu, un miembro, expresó: “Participo en la banda desde julio de 2018. Esto tiene mucho significado para mí porque me siento bien, estoy haciendo algo útil para la sociedad. Seguiré interpretando en la cafetería durante mucho más tiempo.”
Cada viernes, la cafetería está llena de gente (Foto: Quynh Mai/VOV5)
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Por ser tan especial, Mo Pho no solo atrae a los jóvenes, sino también a los adultos mayores, quienes acuden aquí con la esperanza de poder aportar algo a la comunidad. La señora Nguyen Thi Ngoc Bich, de 70 años de edad, recordó que al principio llegó a este lugar por curiosidad y también para disfrutar de las noches musicales. Pero luego, se enamoró del local y se convirtió en una cliente fiel. “Vengo aquí todos los viernes, sin importar la lluvia ni el frío. Me doy cuenta de que tengo más suerte que muchas personas y quiero hacer algo para ayudar a las que están en situación difícil. Conozco varias organizaciones que hacen actividades caritativas, pero aquí puedo sentir la transparencia y el corazón de los organizadores. Mo Pho es un lugar merecedor de venir y definitivamente lo recomiendo a mis amigos”, dijo la mujer.
Después de dos años desde su fundación, la cafetería de Mo Pho ha cumplido bien con su papel de movilizar recursos financieros para las actividades filantrópicas de la Asociación de Doctores Voluntarios. Gracias a esto, la agrupación ha realizado un total de 30 viajes a las zonas más remotas del país para atender la salud de miles de personas en situación difícil y entregarles medicamentos. Sus actos se hacen eco en la sociedad, y así cada vez hay más personas que conocen dicha organización. La cafetería de Mo Pho ha contribuido a conectar a la gente y promover la empatía en la comunidad. En el futuro, los miembros de la asociación esperan que más iniciativas caritativas sean desplegadas para brindar una vida más próspera a los más desafortunados del país.