La entrada de la pagoda Lakhanawong Xung Thum

En la actualidad, la pagoda Lakhanawong Xung Thum está albergando a 21 alumnos de diferentes localidades de la provincia de Soc Trang. Ellos son huérfanos o proceden de familias con escasos recursos económicos. Cada día, los menores reciben una ayuda de 10 a 20 mil dongs (de 50 a 95 centavos de dólar) para desayunar. Los monjes budistas les recomiendan que gasten solo la mitad de ese monto y ahorren el resto. Tran Huyen, viceabad del templo informó: “Vemos la dificultad que enfrentan los lugareños, por eso, damos cobijo y educación a los niños y adolescentes necesitados. Insistimos en ayudarles a seguir con los estudios”.

Alumnos almuerzan en la pagoda

Aquí, los alumnos se benefician de alojamiento, ropa y cursos gratis. Además de las clases, aprenden sutras del budismo en el dialecto jemer. Cada fin de semana, si necesitan pueden regresar a casa para visitar a su familia. Danh Sang, estudiante del quinto grado de la clase 5A de la escuela primaria de Lai Hoa habló sobre su vida en la pagoda: “Cuando vivía en mi casa tenía que ir a pescar para ganarme la vida y así poder financiar mis estudios. Tengo 4 hermanos. Mi abuela me trajo a esta pagoda donde dispongo de libros y ropa. Aquí me siento muy feliz al estudiar con mis compañeros”.

La pagoda rebosa de las sonrisas inocentes de los estudiantes. En su tiempo libre, participan juntos en actividades deportivas y juegos populares, aliviando así su morriña. Tang Chai, alumno del noveno grado de la clase 9A1 de la escuela secundaria de Lai Hoa lleva un año en el templo budista. El adolescente dijo lo siguiente: “Estoy muy alegre al vivir en la pagoda. No tengo padres, por eso, todos los días converso con los monjes. Ellos me aconsejaron mantener los esfuerzos en el estudio y se comprometieron a ayudarme a aprender un oficio en el futuro”.

El viceabad Tran Huyen enseña a los estudiantes el idioma jemer

Junto con la pagoda, las autoridades locales también prestan el apoyo a los estudiantes necesitados. Al respecto, Le Van Vui, jefe de la Dirección de Educación de la cabecera de Vinh Chau afirmó: “Las labores de estos religiosos de la pagoda han contribuido sustancialmente a mejorar la vida de los pobladores locales, especialmente los étnicos y los alumnos con escasos recursos para superar las dificultades y acudir a la escuela. Por nuestra parte, continuaremos proponiendo a las autoridades de nivel superior desarrollar otros puntos similares para crear más condiciones favorables a los alumnos en el acceso a la educación”.

Gracias a los esfuerzos abnegados de los monjes, numerosos jóvenes han crecido y tenido trabajos para ganarse el sustento, lo que les permite vivir con sus seres queridos bajo el mismo techo. La prosperidad de los estudiantes es también la felicidad de la administración de la pagoda. En este sentido, su viceabad reveló: “La comunidad necesita siempre a los talentosos porque sin ellos, resultará difícil promover el desarrollo nacional. Ayudamos a los alumnos desafortunados y estamos dispuestos a mantenerles el máximo apoyo para que se conviertan en personas útiles para la sociedad”.

Además, en la pagoda Lakhanawong Xung Thum los estudiantes están informados de las políticas y leyes vigentes del Estado. También se imparten clases a alumnos fuera de la provincia de Soc Trang para que puedan tener un futuro más brillante. Cabe decir que este templo budista es sólo un punto destacado en las labores humanitarias y la socialización educativa para hacer grande Vietnam.