(VOVworld) – Para los compatriotas Giay, las tortas “chưng” (arroz glutinoso con frijoles verdes y carne de cerdo), “khảo” (harina de arroz glutinoso y azúcar) y “bỏng” (arroz glutinoso tostado mezclado con miel) son alimentos indispensables en la bandeja de ofrendas en las ceremonias, fiestas, funerales y bodas. Estos se ofrecen a los antepasados para informarles sobre los resultados de sus trabajos en el año pasado, así como para pedir salud, suerte y abundante cosecha. Consideran que los dones deben ser limpios y apreciables para que los antecesores no les reprochen.
El “bánh bỏng” es una torta tradicional que los Giay ofrendan a
sus antepasados en fiestas o ceremonias
Diferente del “bánh chưng” de forma cuadrada de los Kinh (mayoritarios), el de los Giay tiene la parte central grande y los dos extremos pequeños, por eso se llama también pastel encorvado. Según los ancianos, la preparación de esta torta es primorosa, ya que se deben seleccionar las hojas “dong” (phrynium) en bosques y el arroz cultivado en pendientes y frijoles verdes descascarados. Otra cosa importante es que se debe escoger la carne magra del trasero del cerdo, adobada con ingredientes y cardamomos asados. La envoltura requiere de la habilidad de las mujeres para que el pastel tenga buena forma y cuando se corta el relleno de carne se divide en todas las partes. La señora Hoang Thi Bich en el villorrio Luong Do, comuna Coc San, distrito Bat Xat, provincia Lao Cai, dio a conocer: “Si la parte doblada es alta y equilibrada, la torta resulta más bonita. Al verla se sabe que la mujer que la hace tiene manos hábiles o no. Cada vez que se encienden los inciensos en honor de los antecesores, se deben poner 7 pasteles y después de 2 días se les pueden bajar del altar.”
Tras envolver, las tortas se colocan sobre una mesa y nunca en los muslos, ya que no se podrán sazonar. Antes de cocinarlos se mojan los pasteles de 3 a 4 horas. En el proceso de cocinar durante unas l0 horas se debe mantener fuego continuo. Al sazonar, las primeras tortas se les expone en el área de los antepasados y el altar de los Lares.
El “bánh chưng” negro es otro manjar típico de la etnia Giay
También en la bandeja de comidas de los Giay el sabroso “bánh bỏng” (pastel hecho de arroz glutinoso mezclado con miel) es indispensable y probado en las fiestas. Los granos del cereal deben ser redondos para que el alimento sea apetitoso. Hoang A Mau, en Bat Xat, Lao Cai, expuso:
“Primero, se cocina a vapor el arroz y cuando se sazona se echa la harina para que los granos no se peguen. Después se exprime y seca para que el arroz no se ponga mohoso. En vísperas de las fiestas se tuesta y mezcla con el azúcar a granel.”
Este alimento lleva sabores de miel de caña y jengibre, que no hay en otras áreas rurales.
Los Giay preparan el “bánh khảo” de harina de arroz glutinoso y azúcar refinada en ocasión del Tet (Fiesta Tradicional del Año Nuevo Lunar), generalmente los días 26 y 27 de diciembre, para ofrecer a sus amigos y visitantes. En lo fundamental, la preparación del “bánh khảo” es similar al “bánh bỏng”. Sin embargo, la diferencia consiste en que después de moler el arroz tostado, se pone debajo de tierra la harina durante 2 o 3 días, para que ésta se ensanche. La señora Vi Thi Thanh en Luong Lao, Coc San, explicó: “Se mezclan la harina con el azúcar a granel hasta que se peguen. Luego se emplea una botella o un palo redondo para laminar. Por último, se usa un molde o una taza para empaquetar el producto.”
Las tortas de los compatriotas Giay se confeccionan con ingredientes producidos por ellos mismos, para expresar el respeto a sus antepasados. También se transmiten de generación en generación hasta ahora como un rasgo cultural típico de su etnia.