(VOVWORLD) - El comercio electrónico está en aumento en el contexto de la pandemia de covid-19. Los agricultores vietnamitas, incluidos los de la provincia norteña de Bac Kan, han sido conscientes de esta tendencia y han utilizado cada vez más la tecnología digital para vender sus productos.
En Tan Thanh, que es una aldea anexa a la comuna de Nong Thuong, las mujeres de la etnia Dao fundaron una cooperativa agrícola especializada en productos a base de cúrcuma. Las medidas de distanciamiento social y las restricciones de viaje que se han implementado para frenar el avance de la pandemia de covid-19 les han obligado a utilizar herramientas digitales para asegurar el flujo de su producción. Por ello, han puesto en marcha nuevos perfiles en distintas redes sociales, así como en determinadas plataformas de comercio electrónico. Además, la cooperativa tiene su propio sitio web como dijo Nguyen Thi Hong Minh, su presidenta.
“En tiempos pandémicos, el comercio electrónico es obviamente la solución más efectiva. En cualquier caso, noto que nuestros clientes lo están usando cada vez más, ya sea a través de nuestro sitio web o por otras formas de promoción comercial, marketing y ventas en línea”, dijo.
Una miembro de la cooperativa Thien An presenta y vende productos a través de plataformas digitales. (Foto: backan.gov.vn)
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La cooperativa Thien An, otro negocio de mujeres, que está ubicada en la comuna de Vi Huong, se dedica a las plantas medicinales y a las almohadas con textura de brocados. Para ampliar el mercado de consumo, sus miembros están empezando a aumentar las ventas en línea. Para ello, han seguido varios cursos de formación para ponerse al día en conocimientos de digitalización. Gracias a estos esfuerzos, sus productos no solo se venden en todo Vietnam, sino también en el extranjero. Ly Thi Quyen, una miembro de esta base, compartió: “Con el comercio electrónico, nuestros productos son conocidos por todos, incluso en el exterior. El número de nuestros pedidos va creciendo significativamente y nuestros ingresos también. La calidad de vida de las miembros ha mejorado”.
Bac Kan es ahora el hogar de decenas de cooperativas y pequeñas y medianas empresas fundadas y dirigidas por las mujeres minoritarias. Eso mismo atestigua Nguyen Thi Hoan, que produce “Mien dong” (tallarines de maranta) y que puede estar orgullosa de haber sido la primera en su provincia en haber logrado exportar al mercado europeo. Señaló: “Participé en muchas sesiones de capacitación organizadas por las autoridades locales, a través de esos talleres he aprendido mucho y sé exponer mis productos en las plataformas electrónicas. De hecho, las ventas en línea se han convertido en una solución importante que nos han permitido ampliar considerablemente nuestra base de clientes tanto nacionales como extranjeros”.
El éxito de los modelos de negocio online ha contribuido a cambiar la percepción de la sociedad, especialmente de los hombres, sobre el papel de las mujeres en el desarrollo económico. Ly Thi Ba, presidenta de la cooperativa agrícola de Tan Son confesó: “Al principio, nuestro negocio no estaba sostenido por la familia, porque según la concepción de la etnia Dao, la economía familiar es propiedad del marido y las mujeres no tienen derechos de gestión económica financiera. Pero ahora que todas estas cooperativas están funcionando efectivamente, algunos hombres dicen que están listos para echar una mano”.
La provincia de Bac Kan acaba de crear su propia plataforma de comercio electrónico, con el objetivo de ayudar a las cooperativas y pequeñas y medianas empresas locales. Se trata de un paso importante para acercar los productos agrícolas de locales a los consumidores nacionales y extranjeros. Esto también marca un cambio positivo sobre el papel de los agricultores y las mujeres en el desarrollo socioeconómico de la provincia.