La gente de la comuna de Bao Dap está alegre ante la alta eficiencia económica de la sericultura.

Tras una exitosa cosecha de capullo y morera, la campesina Tran Thi Hoan, residente en la aldea de Ngoi Hop del distrito de Tran Yen, ni piensa en tomarse un descanso. Junto a su esposo, ambos llegando a los 70 años, el trabajo en su enorme finca de morera de casi 3000 metros cuadrados no parece un gran problema, al contrario, se ven bien entusiasmados.

Según compartió la aldeana Hoan, la inversión inicial fue poca y en poco tiempo lograron recuperar la capital. Además, su cuidado es simple y el trabajo es bastante cómodo para personas mayores de edad. En promedio la familia de Hoan obtiene un ingreso de unos 3000 dólares al año gracias a la sericicultura. De esa manera, Hoan precisó: “Desde que empezamos con la cría de gusanos y el cultivo de la morera ya no dependemos económicamente de nuestros hijos. Incluso, nos sobra dinero para aportar a las obras públicas de la zona, como la construcción de la casa comunal o de las carreteras”.

La familia de la campesina de Nguyen Thi Dung, de la aldea de Dong Buoi en el distrito montañoso de Tran Yen, ha trabajado en la sericicultura desde hace 10 años. Antes cultivaban arroz, pero no daba buen rendimiento, por lo que decidieron probar con la morera y el gusano de seda. El resultado termina siendo satisfactorio. Actualmente, en los 5000 metros cuadrados que posee para la sericicultura puede cosechar hasta 80 kilogramos de capullos al mes, lo que equivale a un ingreso de unos 515 dólares.

En cambio, para la campesina Nguyen Thi Thao esta práctica agrícola es totalmente nueva y por la falta de experiencia su familia opta por formar parte de una cooperativa local. Gracias a los apoyos entre los miembros, su primera cosecha resultó un gran éxito. Así dijo la aldeana Thao: “Tenía dos cajas de gusanos de seda al inicio y siempre podíamos contar con el apoyo de los miembros de la cooperativa. Cuando algunos gusanos contrajeron enfermedades ellos vinieron a ayudarnos porque no teníamos experiencia. El precio de los capullos oscila entre los 7 u 8 dólares por kilogramo. Por eso nuestros ingresos son bastante cómodos”.

La sociedad anónima de sericultura de Yen Bai tiene el plan de comprar 1.100 toneladas de capullos en 2023.

La comuna de Bao Dap posee actualmente casi 150 hectáreas de moreras y para el año pasado los gusanos de seda produjeron 210 toneladas de capullos, equivalentes a un ingreso de más de 850.000 dólares. Para mejorar la economía local, las autoridades comunales buscan ampliar la zona de cultivo de moreras y también una salida estable para su producción. En ese sentido, Ngo Thi Thuy Van, presidenta de la Asociación de Agricultores comunal, explicó: "Anteriormente, cuando todavía no habíamos establecido la conexión con los agricultores locales, ellos criaban gusanos de seda y luego trataban de encontrar comerciantes que les compraran los capullos por su cuenta. El año pasado se construyó en la comuna de Bao Dap una fábrica automatizada de extracción de filamento de seda, lo que reforzó la confianza de los agricultores en que tendrán una salida".

Van afirma que la fábrica, gestionada por la sociedad anónima de sericultura de Yen Bai, se puso en marcha en marzo y tiene una capacidad de 150 toneladas de seda al año, equivalentes a 1.100 toneladas de capullos. Su seda se exporta a India, Japón y la Unión Europea.

De acuerdo con Dinh Xuan Truong, director de la empresa de seda de morera de Yen Bai, para garantizar una oferta estable al mercado, así como la máxima calidad de sus productos, su compañía se ha comprometido a comprar todos los capullos producidos por las comunas del distrito de Tran Yen y otras localidades vecinas. Este año, la compañía tiene previsto adquirir unas 1000 toneladas de capullos, dando así incentivos a los agricultores para que sigan con sus labores de sericicultura.