(VOVWORLD) - Estados Unidos reabrió este lunes el puesto fronterizo de San Ysidro, entre San Diego y la ciudad mexicana de Tijuana, después de permanecer cerrado unas horas ante el paso de la caravana de migrantes centroamericanos.
Anteriormente, México buscó impedir las manifestaciones de los migrantes que se acercaron desde Tijuana a la frontera estadounidense. Unas dos mil personas atravesaban diariamente esa vía, convirtiéndola en el lugar más circulado a lo largo de ambos países.