(VOVWORLD) - “El mayor significado histórico de la victoria del 30 de abril de 1975 es el Vietnam de hoy: esa nación diez veces más hermosa que soñó y nos legó Ho Chi Minh en su testamento político, una nación que debía comenzar a forjarse en cuanto se alcanzara el triunfo que ya se vislumbraba cuando él nos dejó”.
El Héroe de la República de Cuba y presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), Fernando González Llort, Héroe de la República de Cuba y presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), en una entrevista concedida a la VNA. (Foto: VNA) |
Así lo expresó Fernando González Llort, Héroe de la República de Cuba y presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), en una entrevista exclusiva concedida a corresponsales de la Agencia Vietnamita de Noticias (VNA) con motivo del 50 aniversario de la Reunificación Nacional.
González Llort rememoró las palabras de Fidel Castro en 1969, quien reconoció que, aunque Cuba había hecho esfuerzos y sacrificios, estos eran pequeños frente a los extraordinarios padecimientos del pueblo vietnamita en su lucha contra el imperialismo.
Fidel también evocó el célebre llamamiento de Che Guevara en la Conferencia Tricontinental: “¡Creemos dos, tres… muchos Vietnam!”, subrayando que fue precisamente la solidaridad con Vietnam lo que inspiró al Che y a sus compañeros a luchar heroicamente en Bolivia.
“Cayeron por la libertad de los pueblos de América y por la causa del heroico pueblo vietnamita”, dijo.
Según González Llort, toda una generación de jóvenes cubanos comprendió y respaldó aquella gesta. Y no solo en América Latina: en Asia, África, Europa e incluso en Estados Unidos, muchos alzaron la voz contra los crímenes del imperialismo.
Nombres como Ho Chi Minh, el general Vo Nguyen Giap y Nguyen Van Troi se convirtieron en símbolos universales que inspiraron luchas de liberación en todo el mundo.
La victoria del 30 de abril, señaló, no fue solo un triunfo para Vietnam, sino también una alegría inmensa para el movimiento revolucionario cubano e internacional.
El dirigente cubano recordó con emoción aquel día en La Habana: “Fidel fue a la Embajada de Vietnam del Sur, abrazó a cada vietnamita y dijo: ‘¡Esta victoria no es solo de Vietnam, sino también de Cuba y de toda la humanidad!’”.
El presidente del ICAP destacó que la clave del “renacer del dragón” vietnamita reside en su unidad nacional, un valor fundacional del presidente Ho Chi Minh que el Partido Comunista de Vietnam ha preservado y fortalecido con tenacidad. “Unidos vencieron la guerra, unidos reconstruyeron el país, unidos enfrentaron la pandemia como a un enemigo… Esa fuerza hace que el mundo se incline ante Vietnam”.
Conmovido, evocó los símbolos de la entrañable amistad entre ambos pueblos: desde los primeros 23 estudiantes vietnamitas llegados a Cuba en 1961 hasta el reciente envío de 5.000 toneladas de arroz durante la difícil situación alimentaria que atraviesa la isla.
Aprovechó también para anunciar la próxima inauguración de la Cátedra “Ho Chi Minh” en la Universidad de La Habana, destinada al estudio de su legado.
“Los jóvenes vietnamitas en Cuba y los cubanos que aman la cultura vietnamita son los herederos de esta epopeya que comenzaron Fidel y Ho Chi Minh”, concluyó con esperanza.