(VOVWORLD) - En las aldeas de la etnia Mong de la región noroeste, las mujeres dominan excelentes técnicas para tejer brocados y confeccionar ropa tradicional. Dado que el proceso de elaboración de un conjunto es muy largo, Mua Thi Tong, residente de la aldea de Na Phieng, en la provincia de Son La, decidió comercializar estos productos. Por ello, creó una tienda especializada en trajes étnicos para las féminas.
Mua Thi Tong en traje tradicional de la etnia Mong. (Foto: VOV) |
Los atuendos tradicionales de los Mong están hechos de lino teñido con índigo natural, cubierto con una capa de cera de abeja y son cosidos 100% a mano. Esta gama de productos es de muy buena calidad, pero resulta poco rentable para los vendedores y poco accesible para los clientes. Para confeccionar un conjunto, compuesto por una blusa, una falda, un peto y un turbante, se necesitan entre 4 y 5 meses de minucioso trabajo, mientras que los precios varían entre apenas 600 mil dongs (26 dólares) y 2 millones de dongs (89 dólares).
Mua Thi Tong ha pensado mucho en soluciones que le permitan reducir el tiempo de trabajo y adaptarse a la moda actual de la ropa, preservando la apariencia de los trajes tradicionales. Por lo tanto, decidió utilizar tejidos sintéticos e industrializar ciertas etapas de la producción. Así, abrió su tienda en 2019. La emprendedora explicó: “Para variar mi catálogo, me conecté a Internet para recuperar modelos de otras comunidades Mong. Combiné también diseños tradicionales y modernos para responder a las demandas de la clientela".
Productos hechos por Mua Thi Tong con combinación de diseños modernos y tradicionales. (Foto: VOV) |
Un conjunto de ropa de los Mong tiene muchos detalles y es necesario respetar un cierto orden de fabricación. Por ejemplo, para hacer una blusa, comenzamos cortando el cuerpo, los bordes y las mangas. A partir de entonces, se tarda unas dos semanas en crear patrones cosiendo cuentas y monedas. Finalmente, es hora de unir todas las partes. Hoy, usando máquinas, Mua Thi Tong puede hacer más conjuntos en menos tiempo. Consigue vender 25 conjuntos de mujer por unos 869 dólares al mes. También recibe pedidos de otras aldeas.
“La pandemia de covid-19 ha impactado mi negocio. Debido a las medidas de distanciamiento social, tengo menos clientes. Los eventos artísticos también se cancelaron, por lo que ya no puedo vender ropa de escenario. Pero mi tienda todavía marcha. Ahora son los conjuntos domésticos los que funcionan bien", señaló.
Entre las cosechas agrícolas, Mua Thi Tong ofrece trabajos temporales a algunas mujeres de su aldea. Ella les enseña las técnicas necesarias y así pueden obtener ingresos adicionales. Con la ayuda de Tong, Giang Thi Co, residente de la aldea de Na Ot, ahora es propietaria de su propia tienda. Compartió: “Tong es una persona muy dinámica y creativa. También tiene unas manos doradas con las que hace estilismos muy bonitos y originales. También es generosa por haber compartido sus conocimientos con los demás. Sin ella, nunca habría podido abrir mi propia tienda, lo que me genera diez millones de dong (434 dólares) de ganancias al mes”.
Las acciones de Mua Thi Tong también animan a las mujeres de la etnia Mong a seguir usando la vestimenta tradicional y preservar una de las tantas bellezas culturales de su comunidad.